En artículos anteriores hemos visto qué teníamos que tener preparado antes de ponernos a diseñar una campaña de Email Marketing. Si has podido con eso, te proponemos algunos tips que te servirán para comenzar en la implementación.
Elegir el tipo de campaña que queremos diseñar
Si ya tenemos delimitados nuestros objetivos de campaña y nuestro público, probablemente estemos ansiosos por comenzar a enviar nuestro contenido. Pero, ¿cuál es el primer paso?
En primer lugar, te recomendamos que elijas un tipo de campaña específico. ¿Tendremos información y contenido suficiente para proveer un newsletter semanal? ¿Es mejor enviar nuestras ofertas comerciales en cuanto salen? ¿O mandaremos anuncios puntuales cuando realicemos algún evento?
Ninguna de estas estrategias para diseñar una campaña es en sí misma mejor que las otras, e idealmente deberíamos poder combinarlas. Es muy importante no quedar atados a compromisos que no podamos cumplir, y sostener una dosificación de contenido en el tiempo. Si vinieron a nosotros por un template o un descuento, la llegada de nuestros emails por tiempo indefinido tiene que estar justificada. Debemos buscar el mejor formato para expresar lo más valioso de nuestra producción.
Cómo diseñar la estética de nuestra primera campaña de Email Marketing
Una vez planificado esto, estamos en condiciones de poner manos a la obra. Sabemos qué, a quién y cómo queremos enviar nuestros mails: dediquémonos por fin a construir.
En primer lugar, debemos tener en cuenta que nuestros mails, por más que lleguen a una casilla personal y el usuario los haya aceptado, son unos más entre muchos. Quienes consumen publicidad e información por mail, suelen estar suscritos a más sitios de los que pueden seguir. Por eso, para empezar a diseñar nuestra campaña de email marketing correctamente, debemos lograr una presentación atractiva.
Veamos algunas buenas prácticas que servirán de guía para lograrlo.
Dejémosla fácil
Es sabido que los lectores de emails no son realmente lectores. Más bien, escanean los textos en busca de información importante. Por eso vale la pena destacar los puntos principales, organizar bien los textos (sin dejar párrafos demasiado extensos) y sumar imágenes ilustrativas.
Ser siempre reconocibles
Por otra parte, debemos asegurarnos de que nuestras campañas de emails mantengan nuestra identidad de marca. Entre la cantidad de estímulos recibidos en la web hoy en día, y la cantidad de marcas que se comunican por email específicamente, podemos pasar totalmente desapercibidos si no respetamos nuestra identidad. Desde cómo escribimos los asuntos, hasta los colores, tipografía y tipo de fotos deben tener un criterio unificado de elección.
Convertir debe ser lo más fácil
Nunca debemos olvidar que el objetivo implica algún tipo de conversión: que asista a nuestro evento, que compre nuestros productos, que lea nuestros artículos. Así que esto tiene que estar claro, ser visible y fácil de hacer.
No es conveniente dejar un botón pequeño en el fondo del email ni un cartel gigante que diga “compra ya”. Integrada orgánicamente en el correo, nuestra invitación a convertir debe ser totalmente natural, como si fuera obvio lo que el lector debe hacer.
No dejes de cumplir las normas o caerás en la casilla de spam
Todo este trabajo será inútil si nuestros contactos dejan de recibir nuestros emails en su casilla. ¿Y por qué pasaría esto? Bueno, por dejar caer nuestra reputación como emisores. Por mejor diseñados y escritos que estén nuestros emails, habrá gente que quiera dejar de recibirlos. A veces ya resolvieron las dudas que tenían, o están recibiendo demasiados correos y no llegan a leer nada, o simplemente nuestro contenido no era para ellos. Una buena práctica para mantener nuestra reputación es contar con un botón para dar de baja la suscripción. Como sabemos, el Email Marketing se trata de la confianza, y no está bien visto que enviemos correos a quien no quiere recibirlos.
Otra consideración importante será escribir asuntos precisos que describan correctamente tu contenido. No exageres los signos de exclamación ni mayúsculas, o tus envíos serán considerados engañosos o molestos. Puedes utilizar herramientas como Mail Tester antes de enviar tu campaña para asegurarte de que estás haciendo las cosas bien.
¿Listo para diseñar tus campañas?
Esperamos que esta información te sea útil. Si todavía tienes dudas pendientes, puedes hacer tus consultas en nuestro sitio. Estaremos felices de ayudarte. Sabemos que el comienzo no es fácil, pero cuando lo logres te encantará ver los resultados.
¡Éxitos y hasta la próxima!